
De acuerdo con Lucía Bruno, portavoz del grupo que organiza el proyecto, la caravana -que integran 130 voluntarios- logró reunir más de 100 toneladas de artículos para ser enviados a Cuba desde diversos puntos de Norteamérica.
“Iniciamos en Canadá en donde recibimos donativos, y después nos dividimos en 14 grupos que en dos semanas recorrimos 140 ciudades de EE.UU.”, expuso la vocera.
Los vehículos de la caravana transportan material para ayudar a algunas de las aproximadamente 500,000 familias cubanas cuyas casas y pertenencias fueron arrasadas durante la temporada de huracanes del año pasado.
“Llevan herramientas y material de construcción para levantar lo que se cayó durante los huracanes del 2008, equipo médico, medicinas, sillas de rueda, caminadoras y mucho más”, expuso.
Indicó que los miembros de la caravana cruzarán la frontera a México al medio día del martes, y después de cumplir con los trámites de aduanas de ese país, partirán al puerto de Tampico en donde embarcarán las cajas con ayuda en un barco cubano.
Una vez embarcadas las cajas, los miembros de la caravana tomarán un vuelo a la isla donde visitarán escuelas y hospitales y asistirán a la graduación de la Escuela Latinoamericana de Medicina en La Habana, que este año gradúa a 17 estudiantes estadounidenses.
Bruno explicó que el grupo reúne cada año una mayor cantidad de artículos destinados a la isla de Cuba, donados por particulares y organizaciones religiosas y comunitarias.
De acuerdo con su sitio en Internet, los organizadores de la caravana que se lleva a cabo anualmente son miembros de la comunidad interreligiosa “Pastores por la Paz”, que trabaja a favor de causas sociales y por la justicia desde 1967.