Tijuana, Baja California, México (SECOSICE) Cientos de cristianos, en su mayoría jóvenes, tomados de la mano rodearon el palacio municipal, unidos en una profunda oración por la paz, ante la violencia que registra la entidad. Allí elevaron una plegaria a Cristo implorando misericordia y tranquilidad para Tijuana.
Vestidos de blanco y con globos del mismo color, se reunieron en la explanada exterior de palacio municipal donde se hincaron para orar a Cristo, destacándose como una nueva generación diferente que ama a Dios y como cristianos exigieron a las autoridades el cese de tanta violencia, pidiendo a través de la fe, la intercesión de Jesucristo.
Con un tierno mensaje de súplica expuesto en una pancarta que decía “Tijuana, ábrele tu corazón a Jesús”, cientos de cristianos invitaron a jóvenes, adultos y niños a unirse en esta plegaria por la seguridad, formando una extensa valla alrededor de palacio municipal.
En la explanada una nueva generación de jóvenes comprometidos por Tijuana, en el nombre de Jesús clamaron justicia, para que su luz y presencia descienda sobre la ciudad, a lo cual se les unió más gente al observar su noble acción.
Arturo Duarte, miembro de la Asociación Evangélicos, dijo que para ello salieron de sus Iglesias Evangélicas, para interceder por la paz de Tijuana a través de la palabra divina, a fin de poder vivir tiempos mejores, y Jesucristo es el único que puede lograrlo.
Indicó que es la primera vez que llevan a cabo esta expresión de fe a la que se unió gente de todos los estratos sociales y diferentes religiones, ya que la invitación fue abierta para todo creyente, que finalmente respondió al llamado de Dios.
Por lo que ante la buena respuesta de los cristianos llevarán a cabo otra expresión de fe pero en un día hábil, para invitar a las autoridades a unirse en esta plegaria por la seguridad de Tijuana.
“Sabemos que Jesús puede cambiar las cosas por eso es que venimos a interceder”, expuso.
Y con esta esperanza de fe dejaron escapar globos blancos que se elevaron al cielo, como si en ellos fuera ese mensaje de súplica que enviaron a Dios como un signo de su petición.
No sin antes festejar con una inmensa alegría el haberse unido en esta oración por la paz, sellando con un aplauso la gran participación de jóvenes que preocupados por la seguridad de Tijuana elevaron su plegaria a Jesús.
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